jueves, 18 de noviembre de 2010

Basado en hechos irreales, pero factbles


I.- ¿Mamá?
F.- ¡Ay sí! hija mía, Irene, pasa, pasa ¡Estoy en la habitación!
I.- ¿Pero qué haces? (Entra)
(Fernanda lleva una bata violeta muy chillona y rulos, tiene unos 53 años y la cara estirada, pero es innegablemente atractiva. La habitación está forrada en papel de cebra y sobre la cama hay una maleta abierta y pilas de vestidos)
F.-Ay ¿qué taaal? ¡¡Cariño!!(Emocionada) ¡Pero si te están creciendo las tetas! No será un relleno, ¿verdad?  Si lo es, es bien natural…
I.- (Suspira) Mamá de verdad que no tengo tiempo para esto. Si tienes algo importante que decirme te escucho, pero las referencias constantes al vacío que dejó en mí tu fracaso como madre prefiero que te las ahorres, si no, no tengo nada que hacer en esta casa.
F.- Uf, hija, tú y tu humor de perros, de verdad, es que no hay día que no…
I.- ¡Mamá!
F.- ¡Ay, ay! (da un taconazo) Está bien, pesada, vale. Pero siéntate ya y deja de parlotear, cotorrona, que la que tiene algo que decir soy yo. Voy a poner camela, a ver si me estuflan un poco de positividad en el ambiente. (Va al baño que hay junto a la cama)
I.- Insuflan, mama, se dice insuflan (Sentándose en la cama, entre la ropa)
F.- (Desde el baño) Hija mía es apenas llegar y ya me lo vuelves todo malo, ¡fíjate que hasta acaba de ponerse a llover!  Con lo guapa que estarías si sonrieras un poco, y si dejases de vestir como una priora (asomando la cabeza) a lo mejor conseguías novio y todo.
I.-Oh, bueno, (irónica) si quieres te robo un par de prendas, me gustaría ver que opinan en la biblioteca de los pantis de reja y las minifaldas de leopardo.
F.- (Ríe) Cariño mío, te sobran un par de kilillos para entrar en esos pantis
I.- ¡Eh!
F.-Pero mujer, no te lo digo en el mal sentido (desde la puerta), todos tenemos nuestros aquellos. ¿Probaste ya con la dieta del nabo? A mí me fue de lujo, bueno, claro, eso y un poco de gimnasio, hija mía, porque si eso de los genes es verdad y tu eres mitad yo, entonces seguro que algo bueno… bueno, espera, no, porque también serías mitad tu padre… no nada, olvídalo, pero si no siempre te queda la dieta del repollo que…
I.-Fernanda María Jonás Freire, yo seré culona y tetiplana ¡pero al menos tengo dignidad! ¡Soy primera de mi promoción y tengo un máster en biblioteconomía! Me exacerba que me trates como una obesa cuando tu amiga Mamen no cabe ni por la puerta de su casa, además ella parece que se hace la ropa con cortinas viejas y hasta donde sé no vas dándole la paliza…
F.- ¡Niña! ¡Baja la voz coño! Que las paredes son de papel y la Mamen vuelve ahora de sacar al Tito. Tú eres mi nena, mi sangre, y te voy a decir siempre lo que pienso porque soy tu madre. ¡Y ya no me llames Fernanda, llámame Ivonne, que es mi nombre artístico!
I.- ¿Pero qué dices mamá?
F.- Uy ¡¡casi consigues arruinar la sorpresa!!
I.-Bueno ya vale de tanta historia, ¿se puede saber que haces de acá para allá en el baño?
F.- Pues maquillarme Irene, ¡que parece que no sabes lo que es eso! Ay, ay, no, no te vayas. ¡Perdona hija! Perdóname… es que estoy muy nerviosa, ¿sabes?
I.-Bueno a ver.
F.- (Coge dos vestidos y se los coloca sobre la bata) Cuál te parece que dice más “Soy una mujer emprendedora y seria, pero que no le teme a su sexualidad”?
I.-¡¡Mamá!!
M.-(desde la entrada) Nanda, cielo, subía a mi rellano y he oído que me llamabas y algo de la puerta de tu casa, ¿hablamos un ratito? ¡Traigo polvorones!
F.-Mamen, mi amor pasa, pasa, ¡¡tengo Buenas Nuevas!! (Por lo bajo) ¿¿ Pero por qué no has cerrado la puerta??
I.-¡Se supone que iba a irme rápido!
(Aparece Mamen, de la misma edad que Fernanda, pero de una constitución visiblemente más ancha. Lleva un enorme vestido estampado en rosas.)
M.-¿¿Ay si?? ¿Cuáles? Hombre, mira quien ha vuelto al nido. Irene cielito, hacía tanto tiempo que no te dejabas ver. Me encanta tu bolso, querida.
I.- ¡Hola, Mamen! (amable) he estado muy ocupada, a mi me encanta tu erm… vestido.
M.- (Girando sobre sí misma) ¿Ay si? Pues cuando quieras te lo dejo, total, ¡tenemos la misma talla!
F.-Bueno, basta ya, cotorronas… la gran noticia es… ¡ay, ay! Que me sofoco!... ¡ME CASO!
I.-¿¿Otra vez??
M.-Ay Nanda, ¿¿qué me dices?? Que contenta me pones, ¡cuenta, cuenta! No, mira, mejor espérate un segundo, ahora mismo voy a por el orujo y lo celebramos. (Sale a trote hacia la cocina)
I.- (Estupefacta) ¿¿Mamá??
F.-Ay no, mi alma, no, sé lo que estás pensando, pero de verdad que esta vez es el definitivo ¿no me ves, que me tiemblan las piernas como a una colegiala?? ¡Ji ji!
I.-Mamá, recuerdo haberte oído decir exactamente lo mismo ocho veces desde que te divorciaste de papá hace veinte años.
F.-Ay mi amor, ¡no lo entiendes! Se llama Deivid y es americano, vive en Oucland y, bueno, ¡es TAN romántico! El otro día se me declaro cuando estábamos cenando en el casino, ¡¡si vieras tu cuanto glamur, cuanta clase!! Y me ha prometido que todas nuestras cenas van a ser así, ¡va a presentarme en sociedad! Dime cuándo hizo tu padre nada semejante. ¡Si nuestra noche de bodas la pasamos en la peña viendo el Atleti-Sevilla mientras todos los hinchas le frotaban la calva para que le diese suerte al equipo! ¡Además su primo es productor musical, y me va a lanzar como cantante melódica! ¿¡No es genial!? Tranquila nena, ningún paparazzi podrá vincularte con la envidiada vida de Ivonne, plagada de escándalo, extorsión y lujo, pero siempre que guiñe el ojo desde el escenario sabrás que es para ti. ¡Será mi marca personal!


Tristan.

jueves, 11 de noviembre de 2010

Polvo de estrellas

Una vez oi, que todo está hecho de polvo de estrellas, y que las mujeres, estamos hechas de flores y polvos de hada. Sería bonito, pero me veo obligada a afirmar que esa mágica receta está equivocada.

Las mujeres estamos construíadas a base de culpa, dolor, y rencor. Culpa, resquebrajándonos en el interior, gritando ahogadamente, por todos los errores que cometimos; el dolor que nos envuelve por fuera, por todos aquellos errores que no nos atrevimos a cometer; y rencor, el rencor que nos abrasa, por todos los errores que los hombres pagaron con nosotras.

Eso es básicamente una mujer... misteriosa, oscura, bella ante todo, envuelta en un halo de tristeza, con cicatrices que el tiempo no pudo borrar, arrastrándola a la soledad de los incomprendidos... esa es su magia, la simple y sublime belleza de la tristeza.

martes, 9 de noviembre de 2010

Desire of loneliness

Joder joder joder...quiero salir de esta enorme celda de una vez por todas, olvidarme de todo lo que parece importarme durante un tiempo, volver a emocionarme cuando pienso en lo que voy a hacer, echo de menos esos escalofrios que me entraban antes cuando soñaba con volar, ver, observar, y andar...
  Quiza no sirva de mucho desear y no hacer nada al respecto, pero supongo que siempre es un buen comienzo. Al fin y al cabo asi, con un sueño, un deseo, fue como empezo mi primer mini-escapada, 1 semana en asturias, con la unica compañia de mi bici, las montañas, el mar, el viento, la carretera, los eucaliptos, los senderos de caza, los acantilados... y la soledad, bendita soledad....

jueves, 4 de noviembre de 2010

La hora ha llegado

El destino coloca las cartas sobre la mesa. Uno a uno los planetas se alinean y la luz de las estrellas palpita diez veces en el infinito. Orión se alza como ninguna en la gran bóveda. Brilla más que cien soles.El pasado, el presente y el futuro convergen en un segundo y la energía entera de la existencia fluctúa desde las profundidades del abismo en que murmura la niebla primigenia. El origen y el fin. Alfa y Omega. El todo.La causa y la consecuencia. La inmensidad abre mil puertas que dan a diezmil encrucijadas. Los numeros están dados. la claves resueltas. El último gran misterio aguarda.

1-10-100-1000-10000.

Así. El sabado 6. Todo será. En mi casa.

El rey, la torre, el mago... no esperan.


Tristán.